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| (FOTO: ESPECIAL) |
@escupeletras
El atroz ataque
terrorista contra la revista Charlie Hebdo en Francia, donde 12 personas fueron
asesinadas (diez periodistas y dos policías) presuntamente a manos de
integrantes de un ala extremista del islamismo identificada como parte de
Al-Qaeda, ha puesto una vez más sobre la mesa la compleja problemática conformada
por el fenómeno migratorio, los radicalismos religiosos y el colonialismo.
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Desde luego, el
atentado es a todas luces reprobable, inaceptable, condenable. Nunca un grupo
religioso debe atentar contra la libertad de expresión, nunca un grupo
religioso debe imponer sus creencias a sangre y fuego.
El gobierno francés
tiene la difícil tarea de hacer justicia y procurar que un ataque como este no
vuelva a ocurrir.
Aparte está el
perfil de Charlie Hebdo. No es un secreto que sus publicaciones han sido,
cuando menos, provocadoras, en muchos casos reaccionarias, merodean los límites
de la discriminación y resultan ofensivas para diversas creencias, pero por más
polémicos que puedan resultar sus contenidos, el atentado sigue siendo
igualmente condenable. No es el objetivo de este texto hablar de los límites de
la libertad de expresión ni de los fanatismos religiosos, pero es necesario
enfatizar el repudio contra el atentado por si hay por ahí algún partidario del
“se lo merecían”.
(IMÁGENES: Charlie Hebdo)
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En este contexto,
cabe un llamado a la mesura, a la sensatez, a la reflexión. Cabe un llamado de
alerta para prevenirnos de aquellos que son en parte culpables de este caos, lo
atizan y se aprovechan de él para lograr sus fines perversos.
Más allá de las
profundas diferencias con nuestra visión del mundo y de las críticas a la fe
islámica que se hacen desde occidente, en su mayoría capitalista y cristiano,
es preciso entender que no todos los musulmanes son radicales terroristas
dispuestos a matar en nombre de su dios.
En el mundo hay
más de mil 100 millones de musulmanes (más que la suma de las poblaciones de
Estados Unidos, México, Alemania, Italia, Inglaterra, Francia e Israel), pero
no llegan ni a 100 mil los integrantes del islamismo radical terrorista de Al-Quaeda,
los talibanes y el Estado Islámico (ISIS) que buscan imponer su fe mediante la
violencia extrema. Juzgar a toda la fe islámica por un grupo minoritario sería
una injusticia grave.
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| (GRÁFICA: Especial) |
Hay quienes ya
cayeron en el error. Tras los atentados, han ocurrido ataques a mezquitas en
varias partes de Francia.
Valdría la pena
que los que hoy radicalizan sus posturas contra los musulmanes, en su mayoría
cristianos, recordaran un poco de historia.
¿Acaso recuerdan
las atrocidades de la Santa Inquisición? ¿Recuerdan la infamia de las cruzadas?
¿El genocidio de las culturas americanas en la conquista? ¿La violencia inconmensurable
de la evangelización? ¿Recuerdan la complicidad del alto clero católico con Hitler
y Mussolini? Y no hay que irse tan atrás
en la historia. ¿A caso los que hoy piden mano dura contra todos los musulmanes
pidieron mano dura contra todos los cristianos después del horrible ataque de Anders
Breivik, cristiano luterano, del 22 de julio de 2011 en Noruega, donde asesinó
a 77 personas? ¿Alguien pidió que encerraran a todos los cristianos? ¿Alguien
pidió que todos los cristianos fueran segregados? ¿Alguien salió a quemar
Iglesias?
Con qué vara tan
dispareja miden y juzgan algunos cristianos un ataque de este tipo: si es
perpetrado por un islamista radical, entonces todos los musulmanes son
terroristas; pero si es perpetrado por otro cristiano, sólo se trata de un
solitario desequilibrado.
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Antes de poner en
cada musulmán del mundo una etiqueta de “terrorista”, habría que analizar la
relación de los Estados Unidos (EU), la Unión Europea (UE) y de la Organización
del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) con grupos radicales del islamismo y
grupos extrema derecha.
Sin desechar las
sospechas de operaciones de bandera falsa,
repasemos la historia oficial.
Fueron los EU los
que apoyaron a Al-Qaeda en la década de 1980 para combatir la influencia de la
Unión Soviética en Medio Oriente. Fueron ellos quienes encumbraron a Osama Bin
Laden y armaron a los talibanes.
Fueron las
potencias europeas las que solaparon y respaldaron a los grupos neonazis en
Ucrania con tal de que cayera el régimen que se resistía a unirse a la UE.
Fueron los EU y
la UE los que armaron a los rebeldes Sirios para tratar de tumbar el régimen de
Bashar Al-Asad. Son los que compran petróleo barato a esos rebeldes. Son los
que patrocinan sediciones en Afganistán, Libia, Irak e Irán. Son la incubadora
del Estado Islámico.
Y luego vienen y
se extrañan. Hipócritamente se hacen los sorprendidos y se preguntan cómo fue
posible que estos grupos terroristas hayan ganado tanta fuerza cuando es su
dinero y sus armas los que mantienen vivo al islamismo más radical.
Y no aprenden de
las lecciones. Los atentados del 9-11 de 2001 en NY, los del 3-11 de 2004 en
Madrid, los de 7-7 de 2015 en Londres y otros más. Matones a sueldo que cumplían
con un desgaste estratégico contra un enemigo y luego se les voltearon. Los EU
y la UE piensan que pueden criar víboras y que sólo morderán al vecino, pero
no. Cría cuervos y te sacarán los ojos.
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Por siglos, el
imperialismo europeo y el gringo han tratado a Medio Oriente y a África entera
como una fuente de esclavos y recursos inagotables, han saqueado las tierras de
los pueblos originarios, han tratado de imponer su fe y han dejado una estela
de destrucción y miseria a su paso. Y de eso no se acuerdan.
Los europeos
provocan la pobreza en África y Medio Oriente y luego se quejan de la
inmigración hacia sus países cuando esos pobres que dejaron a su paso buscan
una vida digna en las ciudades que se construyeron con los recursos que les
quitaron. Igual que EU con Latinoamérica... y el resto del mundo.
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La derecha del
viejo continente tiene las cosas donde quería. Una ciudadanía europea crispada,
susceptible de aceptar y reproducir políticas antiinmigrantes, sentimientos
islamófobos, estrategias racistas y la radicalización del colonialismo y la
economía neoliberal, esa combinación que engendró la miseria en África y Medio
Oriente, disparando el fenómeno migratorio.
Los EU y la UE
seguro ya preparan el endurecimiento de políticas migratorias y modificaciones
económicas en contra de la clase trabajadora con el pretexto eterno de la
“lucha contra el terrorismo”, ese terrorismo que por un lado condenan y por el
otro patrocinan.
Ya aparecieron los
primeros visos del oportunismo. En la marcha del sábado 11 de enero, en la que legítimamente
se manifestaron más de 3.5 millones de franceses contra el terrorismo, más de
50 mandatarios y representantes diplomáticos de diversas naciones del mundo, entre ellos conocidos personajes de la derecha europea y sus aliados, fingieron que se unían a la movilización y se tomaron una foto simulando ser parte de la marcha, aunque en realidad estaban separados de las grandes manifestaciones populares.
Ahí estuvo el
expresidente francés, Nicolás Sarkozy, quien encabezara la agresión de 2011 contra
Libia, respaldado por EU y Reino Unido, dejando al menos 50 mil muertos a su paso.
Marchó también Petro Poroschenko, quien liderara las revueltas del año pasado
en Ucrania, donde el neonazismo ascendió al poder, dejando 5 mil muertos, entre
ellos los de una cobarde agresión contra sindicalistas en Odessa, donde 116
personas murieron calcinadas por el fuego iniciado por los golpistas. También
se dio cita el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, quien encabeza el
sionismo que ha despojado al pueblo palestino de su tierra y que apenas el año
pasado ordenara la incursión en la franja de Gaza que costó la vida de más de 2
mil palestinos.
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| Conocidos personajes de la derecha europea y sus aliados fingieron unirse a la marcha del 11 de enero. En realidad no marcharon, sólo posaron para la foto. (FOTOS: Especial) |
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El pueblo francés
tiene toda la razón de estar indignado por este suceso, tiene todo el derecho de
salir a la calle y protestar, pero no debe caer en la trampa de la derecha y
del imperialismo de los EU y la EU. Que la exigencia de justicia no desemboque
en la aceptación del abuso. Ya ha avanzado mucho la derecha europea en varias
regiones, especialmente el neonazismo en Ucrania, como para que comience a
ganar más espacios a raíz de este atentado.
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| El pueblo francés tiene toda la razón de estar indignado por este suceso, tiene todo el derecho de salir a la calle y protestar, pero no debe caer en la trampa de la derecha y del imperialismo de los EU y la EU. Que la exigencia de justicia no desemboque en la aceptación del abuso. (FOTO: Especial) |
“A todos los
racistas, islamófobos y antisemitas les pido que no confundan extremistas con
musulmanes… Mi hermano era musulmán y fue asesinado por gente que se dice
musulmana. No lo son, son terroristas”. Éstas fueron las palabras de Malek Marabet, hermano del agente policiaco Ahmed Merabet, cuya ejecución fue vista por todo el mundo en un video que registra a uno de los atacantes cuando lo remataba dándole un tiro en la cabeza mientras estaba tirado en el suelo. No debe haber oídos sordos al llamado de un deudo, de un musulmán que fue un afectado directo del islamismo terrorista.
Craso error del pueblo europeo si le hace el juego a la derecha y a los caprichos neoliberales de EU y la UE. La ciudadanía debe estar alerta ante cualquier intento de restar derechos y libertades, debe estar preparada ante cualquier ofensiva política y económica, ante cualquier embestida discriminatoria. El pueblo europeo debe exigir a sus gobiernos que dejen de saquear al vecino y que dejen de patrocinar o solapar a grupos radicales que luego terminan volteándoseles. Que no sirva de pretexto la lucha contra el terrorismo para justificar (otra vez) una nueva oleada de agresiones imperialistas.
La última vez que le dieron carta abierta a la extrema derecha, casi toda Europa terminó dominada por Hitler. Que la historia no se repita.
PD: Ojalá hubiera tanta solidaridad e indignación, tanto dentro como fuera del país, por los 80 periodistas asesinados en México en menos de 10 años como lo ha habido por el caso Charlie Hebdo.
REFERENCIAS Y NOTAS RELACIONADAS
-Atentado contra Charlie Hebdo
-Musulmanes:
http://es.wikipedia.org/wiki/Musulm%C3%A1n
-Islamismo:
-Islamismo:
-Yo No soy Charlie:
-Wikileaks: La CIA financió a mercenarios de
Siria e Irak
-Europeos compran petróleo a opositores Sirios
-El terror yihadista pone a Francia ante un
desafío histórico
- Atacan mezquitas tras atentado contra 'Charlie Hebdo' en París
- La extrema derecha europea se agita después del ataque contra Charlie
Hebdo
- 'No confundáis extremistas con musulmanes, son terroristas'
-Marcha Francia contra el terrorismo
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