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@escupeletras
Hace un par de años, Peter Brabeck-Letmathe, presidente del grupo
Nestlé, realizó unas declaraciones en las que abogaba por la privatización del
agua. El CEO de la compañía de alimentos más grande del mundo con ingresos por más de 100 mil millones de dólares anuales y la principal
comercializadora de agua purificada en el planeta, manifestó que el hecho de
que el agua sea considerada un derecho humano es una postura “extrema”.
“Es una cuestión de si deberíamos privatizar
el suministro de agua para la población. Una postura que nosotros consideramos
extrema está representada por las organizaciones no gubernamentales que
defienden que el agua es un derecho público, eso significa que como ser humano
tienes derecho al agua. Esto es una visión extrema. Y luego está la otra visión
que dice que el agua es un alimento como cualquier otro, y como producto
alimenticio debe tener un valor de mercado. Personalmente creo que es mejor darle
al alimento un valor para que todos estemos conscientes que tiene un precio, de
manera que se tomen las medidas necesarias para la población que no tiene
acceso al agua”
Brabeck-Letmathe justificó que la percepción de que el agua es gratuita
hace que la gente no le dé el valor que tiene y se malgaste, por lo que la
administración del agua debe entregarse al control privado. Para él no son suficientes
los notables efectos de las campañas de concientización ciudadana sobre la
importancia del cuidado del agua ni el hecho de que una gran parte de la
población corre el riesgo de no poder pagar el costo del agua establecido bajo
criterios empresariales que siempre buscarán el negocio, no el bienestar de la
población en general. Mucho menos toma en cuenta que las grandes multinacionales como la que él encabeza son las que más contaminan y sobreexplotan los mantos acuíferos.
***
***
El caso de la “Guerra
del Agua” en Bolivia debe servirnos de ejemplo. En 1999, la multinacional estadounidense
Bechtel (impulsada por el Banco Mundial), la empresa también norteamericana
Edison y la española Abengoa firmaron un contrato con el entonces presidente
Hugo Bezner, para privatizar el servicio de agua en Cochabamba. No tardó el incremento
de tarifas que llegó a sobrepasar el 50%; el agua escaseaba y pocos podían
pagarla. Los habitantes de Cochabamba literalmente tenían que elegir entre comprar
alimentos o agua. En el 2000 vinieron múltiples protestas que costaron más de
170 heridos y al menos cuatro muertos. Tras la presión social, el gobierno
desistió de la privatización y derogó el acuerdo en abril del 2000. Bechtel inició un proceso legal contra el gobierno de Bolivia,
reclamando indemnizaciones por daños por valor de 25 millones de dólares,
demanda que declinaron por las incansables protestas. Casos similares
ocurrieron, ocurren, en Tanzania, Armenia, Ghana y Sudáfrica, en varias regiones de América Latina y Europa. Eso pasa cuando
un recurso vital se convierte mercancía, en un objeto de negocio de unos cuantos: se restringe,
escasea, se encarece. Y luego el caos.
Por eso es que en el
agua es mayoritariamente pública en Europa (con las excepciones del Reino
Unido y, cada vez más, España y Portugal), por eso es que incluso en Estados
Unidos, donde están tan acostumbrados a priorizar lo privado sobre lo público, han fracasado los intentos privatizadores del agua, por eso es que en
Holanda es ilegal tan sólo el hecho de intentar privatizarla.
Pero los intentos
privatizadores no cesan en todo el mundo y en todo el mundo se trata de los mismos
promotores. En 1990, el su consumo diario de agua de 91 millones de personas
dependía de empresas privadas; hoy en día el consumo diario de agua de más
de 460 millones de personas en el mundo depende de empresas privadas debido a
las políticas de privatización promovidas por el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional.
En tanto, actualmente hay más de 768 millones de personas que carecen de acceso al agua potable en el mundo y mil 400 niños menores de cinco años mueren diariamente de enfermedades diarreicas relacionadas con esta carencia.
En tanto, actualmente hay más de 768 millones de personas que carecen de acceso al agua potable en el mundo y mil 400 niños menores de cinco años mueren diariamente de enfermedades diarreicas relacionadas con esta carencia.
Dicen que las guerras del futuro serán por el control del
agua. Ese camino pasa también por el fenómeno de la privatización.
***
El 4 de marzo pasado, los diputados del PRI, PAN, Verde y Panal
aprobaron en comisiones la nueva Ley General de Aguas, un plan más del peñismo para
continuar despojando a la nación de sus recursos para favorecer a los grandes
corporativos privados.
Ampliando la influencia particular sobre el recurso que se ha venido
fortaleciendo desde los 1990 a base de golpes reformistas, el documento presenta
una larga lista de abusos que busca convertir en ley: da manga ancha a las empresas
privadas para fortalecer su control sobre los sistemas hidráulicos en el país a
través del financiamiento, construcción, operación y mantenimiento de la
infraestructura, blinda las decisiones sobre el recurso para que la ciudadanía
no tenga voz ni voto, privilegia la industria del fracking y el trasvase con
todos los riesgos ecológicos y desigualdades sociales que conlleva y limita el consumo
personal diario a 50 litros máximo cuando ya hay una jurisprudencia que dicta
que se requieren entre 50 y 100 por persona. En pocas palabras, la llamada “Ley
Korenfeld” casi termina de entregar el control del agua a las manos de un
puñado de empresarios y se la arrebata al pueblo.
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Desde hace 30 años, periodo en el que los gobiernos federales en México
tomaron la ruta del neoliberalismo económico, las instituciones públicas se han
debilitado paulatina, pero constantemente, cediendo recursos y facultades a la incitativa
privada. En el sexenio de 1988-1994 ocurrió la mayor temporada de
privatizaciones y hoy el peñismo ha venido a completar lo que dejó pendiente el
salinato. En menos de tres años se han aprobado reformas en la misma dirección
privatizadora en sectores estratégicos como el energético y el de
telecomunicaciones.
Estas legislaciones siguen con fidelidad las bases del capitalismo
neoliberal, privatizar las ganancias y socializar las pérdidas, colocar el
control de los recursos en las manos de un puñado de grandes empresarios, excluir
a la ciudadanía de la toma de decisiones y hacer de todos los recursos y
servicios un negocio de élites sin importar que en el intento se pase encima de
los derechos humanos, la soberanía nacional y la justicia social.
Igual que en las reformas anteriores, la nueva Ley General de Aguas parece
tener dedicatorias precisas. Como traje a la medida, la propuesta encaja a la
perfección a las necesidades de las empresas energéticas interesadas en la
extracción, de constructoras como la consentida Grupo Higa y de las compañías como
Coca-Cola y Nestlé, siempre sedientas, ansiosas por el control de los cuerpos
de agua en todo el mundo.
En México hay 22 millones de personas sin acceso al agua potable (alrededor de 9 millones no tienen acceso a agua entubada y otros 13 millones reciben el líquido contaminado). Con estas cifras es completamente inaceptable siquiera hablar de la posibilidad de una privatización que aumentaría estas condiciones de exclusión y escasez.
En México hay 22 millones de personas sin acceso al agua potable (alrededor de 9 millones no tienen acceso a agua entubada y otros 13 millones reciben el líquido contaminado). Con estas cifras es completamente inaceptable siquiera hablar de la posibilidad de una privatización que aumentaría estas condiciones de exclusión y escasez.
Al gobierno federal y sus aliados se les olvida que el acceso al agua
es un derecho humano, que es imprescindible para la supervivencia humana y el
desarrollo social, que es un recurso renovable pero limitado que debe socializarse
y sobre el cual debe anteponerse el acceso universal y manejo sustentable al
negocio de unos cuantos.
***
Antes que reforzar la autonomía operativa y financiera de los órganos
públicos existentes, antes que fomentar la participación ciudadana y la procuración
de la sustentabilidad ecológica, antes que priorizar la cobertura universal en el
acceso al agua, la actual administración ha preferido seguir cediendo a las exigencias
de las cúpulas empresariales, privilegiando lo privado sobre lo público. De
nada sirve que las instituciones se queden con el membrete de su nombre público,
si el control y usufructo de estas instituciones es particular.
Ya privatizados la mayoría de los recursos estratégicos del país, ya
entregadas las minas, gran parte del campo, el gas y el petróleo, la última
frontera es el agua. No les ha bastado colocar la mayoría de los sectores en los
bolsillos privados, los gobernantes y legisladores están demostrando que pueden
caer aún más bajo, hasta el mero fondo, privatizando hasta el líquido de la vida.
Dice el refrán popular que a nadie se le niega un vaso con agua. Eso
es precisamente lo que están haciendo, negar uno de los derechos básicos, restringiéndolo
a gusto y capricho del capital para hacer negocios.
Y así es como los diputados podrían aprobar una Ley General
de Agua a todas luces anticonstitucional, privatizadora, excluyente e injusta;
una ley que parece dictada por el mismísimo Peter Brabeck-Letmathe, una ley que
convierte la necesidad en un lujo y el derecho humano en un privilegio.
Ya sólo faltará que nos privaticen el aire.
REFERENCIAS Y TEXTOS
RELACIONADOS:
- (VIDEO) Abuela grillo.
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Una animación que hace un bello homenaje a las y
los habitantes de Bolivia en su lucha contra la privatización del agua.
-Presidente de Nestlé propone privatizar toda el agua del planeta:
- PRI, PAN y Verde dan sí a
dictamen que privatiza agua:
-Dictamen de la Ley General de
Aguas aprobado por el PRI, PAN y Verde en comisiones:
- Estos son los puntos polémicos
de la Ley General de Aguas:
- Astillero: Siguiente negocio:
el agua
-Aguas con la ley de aguas,
artículo de Alberto Cerdán:
-Página de la organización Agua
Para Todos:
-Aguas con la Ley de Aguas, de Agua
Para Todos:
- ¿Qué busca la Ley de Aguas de
Korenfeld?
-Ayúdanos a construir el Bueno Gobierno
del Agua:
- ¿Qué propone la Iniciativa
Ciudadana de Ley General de Aguas?
-La Guerra del Agua
en Cochabamba. Crónica de una vitoria dolorosa
- La Guerra del Agua
(Cochabamba, Bolivia, abril 2000)
- El agua de México,
botín de empresas privadas, denuncian ante el Tribunal Permanente de los
Pueblos
-El fracaso de la privatización
del agua en los Estados Unidos
-Ghana. La batalla
por el agua.
-La lucha contra la
privatización del agua en Sudáfrica
-Desvergüenzas políticas
en la privatización del agua.
-La privatización y
mercantilización de las aguas: Normas y regulaciones que rigen al sector
sanitario. Dificultades y desafíos.
-El Banco Mundial y
la privatización del agua: El dinero público se va por el desagüe
-El oro azul. La
crisis mundial del agua y la reificación de los recursos hídricos del planeta.
-El plan de
privatización del agua de Argentina se seca
-El Libre Comercio y
la Privatización de los Servicios Básicos. Privatización del Agua en Colombia:
Impactos en mujeres, niñas, niños, y
familias.
-Más de 750 millones
de personas sin acceso al agua potable en el mundo
-Sin acceso a agua
potable 22 millones de mexicanos
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